Tenía un plan maestro. Lo había diseñado paso por paso, y en mi imaginación era redondo. Como suele pasar, las dificultades que preveía era sencillas de solucionar y el resto encajaba como piezas pequeñas que formaban un gran puzzle.
Era realmente perfecto. Bueno, no. No era perfecto, pero era lo que me venía bien, para qué negarlo. Además, se me antojaba que era el momento adecuado para que ese proyecto se hiciese realidad.
Claro, como suele pasar en estas circunstancias, de pronto viene la realidad y te da de bofetadas.
Y ahora... contemplo mi plan desdibujado, hecho añicos y sin opción a recomponerlo. No contaba con la realidad, que siempre se impone de la forma más dura.
Otro camino (más) que se cierra.
Pero... no voy a quedarme lamiendo las heridas, lamentándome e intentar recuperar trozos. Podría, pero eso no me ayuda a seguir avanzando, sólo a quedarme estancada. Evidentemente, hubiera preferido que todo saliese según lo planeado, pero ya que no ha sido así, no hay nada mejor que empezar de nuevo y ponerse manos a la obra. Una pataleta no me arreglará nada y una está ya en esas edades en las que no tienes a quién irle a llorar, sino que hay que enfrentarse a lo que venga.
Así que nada, a por el siguiente plan. Quién sabe, puede que sea mucho mejor incluso que el anterior.
Era realmente perfecto. Bueno, no. No era perfecto, pero era lo que me venía bien, para qué negarlo. Además, se me antojaba que era el momento adecuado para que ese proyecto se hiciese realidad.
Claro, como suele pasar en estas circunstancias, de pronto viene la realidad y te da de bofetadas.
Y ahora... contemplo mi plan desdibujado, hecho añicos y sin opción a recomponerlo. No contaba con la realidad, que siempre se impone de la forma más dura.
Otro camino (más) que se cierra.
Pero... no voy a quedarme lamiendo las heridas, lamentándome e intentar recuperar trozos. Podría, pero eso no me ayuda a seguir avanzando, sólo a quedarme estancada. Evidentemente, hubiera preferido que todo saliese según lo planeado, pero ya que no ha sido así, no hay nada mejor que empezar de nuevo y ponerse manos a la obra. Una pataleta no me arreglará nada y una está ya en esas edades en las que no tienes a quién irle a llorar, sino que hay que enfrentarse a lo que venga.
Así que nada, a por el siguiente plan. Quién sabe, puede que sea mucho mejor incluso que el anterior.
3 comentarios:
Buena filosofía Bett. No triunfa el boxeador que más pega sino el que mejor encaja los golpes.
feliz año boguero 2011 y espero seguir leyendonos.
abrazos.
Llego tarde, muuuuy tarde a contestar tu comentario, pero estaba ahí, recordándome que merecía respuesta.
Bueno, que me voy.
Pues sí, es decir no me salió como esperaba, pero siempre hay más opciones, y que pongamos nuestra esperanza en algo no siempre implica que sea lo que más nos conviene.
Espero que enero haya sido genial para ti, y que el año continúe siendo estupendo!
Saludos!
¿Cómo ha sido enero?
Pues como bien está lo que bien acaba diremos que bien. Pero entre medio y siguiendo el simil pugilistico he tenido que entrar en varios intercambios de golpes, que yendo ganando a los puntos como iba, es una cosa peligrosa porque te puedes comer alguna mano y terminar en la lona.
¿Y porqué te metes en le intercambio de golpes si vas ganando?
porque el arbitro está dormido y me estaban entrando golpes bajos sin conocimiento.
Aprendizajes del mes de enero:
1-.Un selector de personal amigo (ahora se les llama head hunter y queda mas fino) me suele decir no olvides que los mas mediocres suelen coinidir con los mas mezquinos y que en el campo de la mezquindad ellos siempre ganan escapate de ese juego.
2-.hay gente especialista en meter mal y luego siempre acaba yendose de puntillas mientras el resto se golpea, de vez en cuando hay que meterlos dentro de la pelea para que vean que se pueden comer también alguna hostia.
3-.Hay algunos que tenemos el sindrome salmon es decir que nos manejamos muy bien en aguas revueltas.
4-.tengo la teoría de cuando parece que me va peor es cuando realmente me va mejor. Esto es una argucia pues le da sentido a verte en el suelo y te levantas con más fuerza sabiendo que como siempre será una falsa derrota y que es la señal de que vas a ganar.
5-.Porcum canere ne doceat iam tempus perit et animal intemperabis. No enseñes a cantar al cerdo porque perderás el tiempo y cabrearraras al animal. (Si no es así la frase merecería serlo).
6-.Cuidado con algunos juegos laborales: Vamos a jugar a hacer el tonto y cuando venga el jefe perderá el que más haya hecho el tonto pero si antes alguien se hace el listo lo echamos del juego.
7-.Ojo con "las mujeres del concejal" de mi ultimo cuento policiaco.
Disculpas por usurpar el blog pero me he sentido comodo en tu salón y he puesto los pies en la mesa me he pillado una cerveza y charlando charlando se me han hecho las tantas en tu casa.
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